Los hermanos Galván fueron pioneros en la generación de una escena pop independiente en México, allá por 1998 (de nuevo, la prehistoria). Esta canción la incluí en un cd para el coche al que llamaba "el cd del buen rollo" y que tenía otras canciones de las que también iré hablando aquí y que me alegraban el día. Después de tantos años, todavía no tengo decidido si esta canción es surfera, cursi, una obra maestra del pop sin complicaciones o todo a la vez. Pero qué se le va a hacer, me gusta.
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